Desde tiempos inmemoriales los mecanismos del poder han intentado controlar a las personas y para ello han diseñado y ejercido múltiples estrategias en las que la psicología de masas se encuentra siempre presente. Seguramente relacionas al poder con la autoridad que, por el rol que juega en la sociedad, se interesa especialmente en el control de la población que intenta dirigir. No obstante, no es el único ente interesado en ejercer control sobre las masas. Las empresas comerciales, por ejemplo, luchan a brazo partido día con día por ganarse el favor del público, para lo cual, ponen en marcha una enorme maquinaria de persuación publicitaria.
¿Qué es la psicología de masas?
En cada época, el poder se ha valido de los medios a su alcance para difundir su mensaje entre la población que pretende controlar. Los avances en el conocimiento tanto de la mente humana como de la tecnología han permitido que los mensajes sean difundidos con mayor prontitud, en un territorio más amplio que en ocasiones llega a ser global y a través de múltiples plataformas. De tal suerte que, como sabes, el número de personas alcanzadas en la actualidad es increíblemente elevado.
Antiguamente, el poder representado normalmente por el Estado empleaba la propaganda como estrategia para influir en la mente de sus gobernados. Mediante esta práctica, se difundieron las ideas que el poder quiso hacer prevalecer en la mente de la población. Te contamos que, según la definición del diccionario, la propaganda no es otra cosa que: «La difusión o divulgación de información, ideas u opiniones de carácter político, religioso, comercial, etc., con la intención de que alguien actúe de una determinada manera, piense según unas ideas o adquiera un determinado producto.»
Lo que la definición no menciona es que la propaganda, históricamente utilizada, te muestra únicamente los argumentos y puntos de vista que convienen a quien la difunde omitiendo deliberadamente aquellos aspectos que le perjudican. Como supones, mediante esta práctica se te niega el derecho de conocer los aspectos negativos o menos atractivos de la propuesta, con lo cual, cualquier decisión que tomes será con base en información incompleta o sesgada de origen.
En términos de la psicología de masas, un individuo deja de actuar por voluntad propia para someterse a la voluntad colectiva sin cuestionarla. Como has visto en la definición, la influencia que recibes puede repercutir en cualquier aspecto de tu vida, ya sea en el plano religioso, el social, el económico, el político o inclusive el familiar. Queda claro que el Estado no es el único organismo social interesado en influenciarte.
Mediante los mensajes que recibes a través de los distintos medios, el poder pretende dirigir en su favor tu opinión hacia cierto tema de tal suerte que, en el momento adecuado, recibas de buen grado o incluso llegues a desear que ocurra algún hecho, apoyes una idea o lleves a cabo alguna acción que en otras condiciones no tendrías disposición de ejecutar.
La persuación publicitaria
Una de las actividades en las que más fácilmente puedes percibir la influencia de la sugestión es en el comercio. Con seguridad podemos afirmar que continuamente se te bombardea con imágenes, sonidos y frases escritas con la finalidad de estimularte a adquirir aquello que se te expone.
Debido a tu condición particular, nivel educativo, conocimientos generales y demás características personales, responderás mejor a un cierto tipo de estímulo que a otro. Por esta razón, los publicistas explotan varios tipos de sensación con el propósito explícito de generar en ti una emoción y, en consecuencia, inducirte a una acción, en este caso, la adquisición de lo que se te muestra.
Los recursos más típicamente utilizados por la publicidad son el miedo, el humor, los recursos racionales, la música, la idea de escasez, la sensualidad y el sexo. Como podrás notar, todas y cada una de las categorías se encuentran estratégicamente pensadas y son utilizadas para motivarte a actuar. Mediante la presentación de una idea convenientemente envuelta en uno o varios de estos tópicos, el publicista pretende impactar en tu mente y convencerte del mensaje.
Los medios publicitarios
Si bien es verdad que la propaganda siempre se ha diseminado en la sociedad bajo el auspicio del poder, el surgimiento de los medios de comunicación masiva le infundieron un alcance tremendo. Primeramente, los medios impresos seguidos de la radio y la televisión, también llamados en su conjunto «medios tradicionales» fueron por mucho tiempo los vehículos de la propaganda y la publicidad. Con el avance de la ciencia electrónica nuevos medios se han incorporado a la artillería publicitaria, siendo los más recientes aquellos que se han bautizado con el nombre de «redes sociales».
Con el surgimiento de las redes sociales, la psicología de masas incorporó nuevas armas a su poderoso arsenal. Nuevas y más sofisticadas formas para intentar incidir en tus gustos, tus opiniones y tus ideas se muestran todos los días a través de las plataformas de vídeo o de las aplicaciones para generar conversaciones en las que, cada vez con más frecuencia, encontrarás la participación de gente patrocinada por quienes desean manipular las tendencias naturales del pensamiento popular.
Es posible que las redes sociales hubieran surgido inocentemente con la idea de acercar a las personas, sin embargo, muy pronto, los entes del poder entendieron el increíble potencial que dichas herramientas tendrían para sus propios fines y, rápidamente, poblaron los canales con su publicidad y propaganda ahora en voz de emisarios que pasan por personas comunes, emitiendo su propio juicio desinteresado.
Si la intención de ser persuadido te resulta demasiado obvia, tu respuesta natural seguramente será el rechazo, por ello, la sutileza es un elemento clave para que la sugestión dé resultados y las redes sociales han proporcionado una formidable plataforma para tal efecto.
Es necesario mantenerte alerta pues se escuchan cada vez con más frecuencia historias relatando que, las redes sociales se han convertido en una herramienta más al servicio del poder. Mediante la recolección de información relativa a tus gustos, tu entorno y tus ideas, obtiene valiosos elementos. Con ellos y aplicando la psicología de masas modelan tu pensamiento sin que apenas puedas darte cuenta.
Como siempre, la investigación de mercados te puede ayudar a entender la psicología de masas. El alma colectiva es más que la suma de los individuos.
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Publicado por: José Pérez Barrozo